Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierraComo un débil cristal.¡todo sucederá!
Podrá la muerte cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarseLa llama de tu amor.
domingo, 18 de octubre de 2009
sábado, 3 de octubre de 2009
LA NIÑA ROSA, SENTADA...
Autor: Rafael Alberti
La niña rosa, sentada.Sobre su falda,como una flor, abierto, un atlas.¡Cómo la miraba yoviajar, desde mi balcón!Su dedo, blanco velero,desde las islas Canariasiba a morir al mar Negro.¡Cómo la miraba yomorir, desde mi balcón!.La niña, rosa sentada. Sobre su falda,como una flor,cerrado, un atlas.Por el mar de la tardevan las nubes llorando rojas islas de sangre.
Autor: Rafael Alberti
jueves, 17 de septiembre de 2009
miércoles, 8 de julio de 2009
AJEDREZ
I
En su grave rincón, los jugadores rigen las lentas piezas. El tablero los demora hasta el alba en su severo ámbito en que se odian dos colores.
Adentro irradian mágicos rigores las formas: torre homérica, ligero caballo, armada reina, rey postrero, oblicuo alfil y peones agresores.
Cuando los jugadores se hayan ido, cuando el tiempo los haya consumido, ciertamente no habrá cesado el rito.
En el Oriente se encendió esta guerra cuyo anfiteatro es hoy toda la tierra. Como el otro, este juego es infinito.
II
Tenue rey, sesgo alfil, encarnizada reina, torre directa y peón ladino sobre lo negro y blanco del camino buscan y libran su batalla armada.
No saben que la mano señalada del jugador gobierna su destino, no saben que un rigor adamantino sujeta su albedrío y su jornada.
También el jugador es prisionero (la sentencia es de Omar) de otro tablero de negras noches y blancos días.
Dios mueve al jugador, y éste, la pieza. ¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza de polvo y tiempo y sueño y agonías?
Jorge Luis Borges, 1960
viernes, 12 de junio de 2009
martes, 19 de mayo de 2009
sábado, 11 de abril de 2009
Campanas
La verdad no será
el final de ningún camino
sino principio y fin.
La verdad es ahora:
sin vericuetos
el corazón fresco y pleno
de juventud y alegria, en un instante único.
Percibe entonces las alegres
campanadas de tu orazón.
Campanadas de júbilo que
anuncian el único camino.
Escrito por: Iascha (Jacobo)
el final de ningún camino
sino principio y fin.
La verdad es ahora:
sin vericuetos
el corazón fresco y pleno
de juventud y alegria, en un instante único.
Percibe entonces las alegres
campanadas de tu orazón.
Campanadas de júbilo que
anuncian el único camino.
Escrito por: Iascha (Jacobo)
sábado, 28 de febrero de 2009
viernes, 13 de febrero de 2009
viernes, 30 de enero de 2009
La desesperanza está fundada en lo que sabemos, que es nada, y la esperanza sobre lo que ignoramos, que es todo.
By: Maurice Maeterlinck (1862-1949) Escritor belga.
By: Maurice Maeterlinck (1862-1949) Escritor belga.
miércoles, 28 de enero de 2009
Cuando nos separamos
Cuando nos separamos En silencio y con lágrimas, Con el corazón medio roto, Para apartarnos por años, Tu mejilla se volvió pálida y fría, Y más frío tu beso; En verdad aquella hora predijo El dolor de esta.
El rocío de la mañana Se hundió gélido en mi frente - Se sintió como el anuncio De lo que siento hoy. Todos tus votos están rotos, Y ligera es tu fama; Escucho decir tu nombre, Y comparto su vergüenza.
Te nombran frente a mí, Un toque lúgubre en mi oído; Un estremecimiento viene a mí - ¿Por qué te quise tanto? No saben que te conocí, Aquellos que te conocen demasiado bien: - Por mucho, mucho tiempo he de arrepentirme de tí, Demasiado hondo como para expresar.
En secreto nos encontramos - En silencio me lamento, De que tu corazón pudiese olvidar, Tu espíritu engañar. Si llegara a encontrarte Tras largos años, ¡Cómo habría de saludarte! - Con silencio y lágrimas.
Lord Bayron
martes, 27 de enero de 2009
Carta de despedida de Ernesto "Che" Guevara a Fidel Castro
Fidel:
Me recuerdo en esta hora de muchas cosas, de cuando te conocí en casa de María Antonia, de cuando me propusiste venir, de toda la tensión de los preparativos. Un día pasaron preguntando a quién se debía avisar en caso de muerte y la posibilidad real del hecho nos golpeó a todos. Después supimos que era cierto, que en una revolución se triunfa o se muere (si es verdadera). Muchos compañeros quedaron a lo largo del camino hacia la victoria. Hoy todo tiene un tono menos dramático porque somos más maduros, pero el hecho se repite. Siento que he cumplido la parte de mi deber que me ataba a la revolución cubana en su territorio y me despido de ti, de los compañeros, y de tu pueblo, que ya es mío. Hago formal renuncia de mis cargos en la dirección del partido, de mi puesto de ministro, de mi grado de comandante, de mi condición de cubano. Nada legal me ata a Cuba, sólo lazos de otra clase que no se pueden romper como los nombramientos.
Haciendo un recuento de mi vida pasada creo haber trabajado con suficiente honradez y dedicación para consolidar el triunfo revolucionario. Mi única falta de alguna gravedad es no haber confiado más en ti desde los primeros momentos de la Sierra Maestra y no haber comprendido con suficiente celeridad tus cualidades de conductor y de revolucionario. He vivido días magníficos y sentí a tu lado el orgullo de pertenecer a nuestro pueblo en los días luminosos y tristes de la crisis del Caribe. Pocas veces brilló más alto un estadista que en esos días, me enorgullezco también de haberte seguido sin vacilaciones, identificado con tu manera de pensar y de ver y apreciar los peligros y los principios. Otras tierras del mundo reclaman el concurso de mis modestos esfuerzos. Yo puedo hacer lo que te está negado por tu responsabilidad al frente de Cuba y llegó la hora de separarnos.
Sépase que lo hago con una mezcla de alegría y dolor; aquí dejo lo más puro de mis esperanzas de constructor y lo más querido entre mis seres queridos... y dejo un pueblo que me admitió como su hijo: eso lacera una parte de mi espíritu.
En los nuevos campos de batalla llevaré la fé que me inculcaste, el espíritu revolucionario de mi pueblo, la sensación de cumplir con el más sagrado de los deberes: luchar contra el imperialismo dondequiera que esté; esto reconforta y cura con creces cualquier desgarradura.
Digo una vez más que libero a Cuba de cualquier responsabilidad, salvo la que emane de su ejemplo. Que si me llega la hora definitiva bajo otros cielos, mi último pensamiento, será para este pueblo y especialmente para ti. Que te doy las gracias por tus enseñanzas y tu ejemplo y que trataré de ser fiel hasta las últimas consecuencias de mis actos. Que he estado identificado siempre con la política exterior de nuestra revolución y lo sigo estando. Que en dondequiera que me pare sentiré la responsabilidad de ser revolucionario cubano y como tal actuaré. Que no dejo a mis hijos y mi mujer nada material y no me apena; me alegro que así sea. Que no pido nada para ellos, pues el Estado les dará lo suficiente para vivir y educarse.
Tendría muchas cosas que decirte a ti y a nuestro pueblo pero siento que son innecesarias, las palabras no pueden expresar lo que yo quisiera, y no vale la pena emborronar cuartillas. Hasta la victoria siempre. ¡Patria o Muerte!
Te abraza con todo fervor revolucionario
Bye: Che
Me recuerdo en esta hora de muchas cosas, de cuando te conocí en casa de María Antonia, de cuando me propusiste venir, de toda la tensión de los preparativos. Un día pasaron preguntando a quién se debía avisar en caso de muerte y la posibilidad real del hecho nos golpeó a todos. Después supimos que era cierto, que en una revolución se triunfa o se muere (si es verdadera). Muchos compañeros quedaron a lo largo del camino hacia la victoria. Hoy todo tiene un tono menos dramático porque somos más maduros, pero el hecho se repite. Siento que he cumplido la parte de mi deber que me ataba a la revolución cubana en su territorio y me despido de ti, de los compañeros, y de tu pueblo, que ya es mío. Hago formal renuncia de mis cargos en la dirección del partido, de mi puesto de ministro, de mi grado de comandante, de mi condición de cubano. Nada legal me ata a Cuba, sólo lazos de otra clase que no se pueden romper como los nombramientos.
Haciendo un recuento de mi vida pasada creo haber trabajado con suficiente honradez y dedicación para consolidar el triunfo revolucionario. Mi única falta de alguna gravedad es no haber confiado más en ti desde los primeros momentos de la Sierra Maestra y no haber comprendido con suficiente celeridad tus cualidades de conductor y de revolucionario. He vivido días magníficos y sentí a tu lado el orgullo de pertenecer a nuestro pueblo en los días luminosos y tristes de la crisis del Caribe. Pocas veces brilló más alto un estadista que en esos días, me enorgullezco también de haberte seguido sin vacilaciones, identificado con tu manera de pensar y de ver y apreciar los peligros y los principios. Otras tierras del mundo reclaman el concurso de mis modestos esfuerzos. Yo puedo hacer lo que te está negado por tu responsabilidad al frente de Cuba y llegó la hora de separarnos.
Sépase que lo hago con una mezcla de alegría y dolor; aquí dejo lo más puro de mis esperanzas de constructor y lo más querido entre mis seres queridos... y dejo un pueblo que me admitió como su hijo: eso lacera una parte de mi espíritu.
En los nuevos campos de batalla llevaré la fé que me inculcaste, el espíritu revolucionario de mi pueblo, la sensación de cumplir con el más sagrado de los deberes: luchar contra el imperialismo dondequiera que esté; esto reconforta y cura con creces cualquier desgarradura.
Digo una vez más que libero a Cuba de cualquier responsabilidad, salvo la que emane de su ejemplo. Que si me llega la hora definitiva bajo otros cielos, mi último pensamiento, será para este pueblo y especialmente para ti. Que te doy las gracias por tus enseñanzas y tu ejemplo y que trataré de ser fiel hasta las últimas consecuencias de mis actos. Que he estado identificado siempre con la política exterior de nuestra revolución y lo sigo estando. Que en dondequiera que me pare sentiré la responsabilidad de ser revolucionario cubano y como tal actuaré. Que no dejo a mis hijos y mi mujer nada material y no me apena; me alegro que así sea. Que no pido nada para ellos, pues el Estado les dará lo suficiente para vivir y educarse.
Tendría muchas cosas que decirte a ti y a nuestro pueblo pero siento que son innecesarias, las palabras no pueden expresar lo que yo quisiera, y no vale la pena emborronar cuartillas. Hasta la victoria siempre. ¡Patria o Muerte!
Te abraza con todo fervor revolucionario
Bye: Che
domingo, 25 de enero de 2009
Carta de Lord Byron a Caroline LambLord Byron (1788 - 1824) fue uno de los más reconocidos donjuanes. Un poeta mundialmente famoso a los 24, él tenía un escrito pero asunto extremadamente apasionado romance con Caroline Lamb. Presionado por la madre de Caroline (quién puede haber estado interesada en Byron), él utilizó la oportunidad parade poner fin a la relación. En esta carta, él da sus razones.
Agosto de 1812
Mi muy querida Caroline, Si las lágrimas, que usted vio y sabe que no soy aficionado a verter, si la agitación en la cual me separé de usted, agitación que usted debe haber percibido a través de todo este tenso, nerviosísimo proceso, no comenzaron hasta que el momento de dejarle se acercó, si todo lo que he dicho y hecho, y estoy aún preparado para decir y hacer, no han probado suficientemente cuáles son y serán mis sentimientos verdaderos siempre hacia usted, mi amor, no tengo ninguna otra prueba a ofrecer. Dios sabe que deseo verla feliz, y cuando renuncié a usted, o mejor dicho cuando usted por un sentido del deber a su marido y madre renunció a mí, usted deberá reconocer la verdad de lo que de nuevo prometo y hago voto, que ninguna otra en palabra o hecho ocupará el lugar en mi afecto, que es y será consagrado a usted hasta el fin de mi existencia. Nunca supe hasta este momento, la locura de mi queridísima y más amada amiga. No puedo expresarme, éste no es tiempo para palabras, pero encontraré orgullo y un placer melancólico, en el sufrimiento que usted usted misma apenas puede concebir, para usted ponga no conocerlo. Ahora debo salir con el corazón cargado, porque apareciendo esta tarde detendré cualquier historia absurda que los acontecimientos de hoy pudieran originar. Usted piensa ahora que soy frío y severo, y ingenioso -otros pensarán igual, hasta su madre- esa madre a quien debimos sacrificar mucho de hecho, más, mucho más en mi caso, de lo que ella sepa o pueda jamás imaginarse. "Prometer no amarla" Ah, Caroline, está más allá de la promesa, pero atribuya todas las concesiones al motivo apropiado y nunca deje de sentir todo que usted ya ha comprobado, y más que puede ser sabido siempre por mi propio corazón, quizás el suyo. Quiera Dios protegerle, perdonarle y bendecirle, siempre y aún más que siempre Su tan apegado
BY: BYRON
Agosto de 1812
Mi muy querida Caroline, Si las lágrimas, que usted vio y sabe que no soy aficionado a verter, si la agitación en la cual me separé de usted, agitación que usted debe haber percibido a través de todo este tenso, nerviosísimo proceso, no comenzaron hasta que el momento de dejarle se acercó, si todo lo que he dicho y hecho, y estoy aún preparado para decir y hacer, no han probado suficientemente cuáles son y serán mis sentimientos verdaderos siempre hacia usted, mi amor, no tengo ninguna otra prueba a ofrecer. Dios sabe que deseo verla feliz, y cuando renuncié a usted, o mejor dicho cuando usted por un sentido del deber a su marido y madre renunció a mí, usted deberá reconocer la verdad de lo que de nuevo prometo y hago voto, que ninguna otra en palabra o hecho ocupará el lugar en mi afecto, que es y será consagrado a usted hasta el fin de mi existencia. Nunca supe hasta este momento, la locura de mi queridísima y más amada amiga. No puedo expresarme, éste no es tiempo para palabras, pero encontraré orgullo y un placer melancólico, en el sufrimiento que usted usted misma apenas puede concebir, para usted ponga no conocerlo. Ahora debo salir con el corazón cargado, porque apareciendo esta tarde detendré cualquier historia absurda que los acontecimientos de hoy pudieran originar. Usted piensa ahora que soy frío y severo, y ingenioso -otros pensarán igual, hasta su madre- esa madre a quien debimos sacrificar mucho de hecho, más, mucho más en mi caso, de lo que ella sepa o pueda jamás imaginarse. "Prometer no amarla" Ah, Caroline, está más allá de la promesa, pero atribuya todas las concesiones al motivo apropiado y nunca deje de sentir todo que usted ya ha comprobado, y más que puede ser sabido siempre por mi propio corazón, quizás el suyo. Quiera Dios protegerle, perdonarle y bendecirle, siempre y aún más que siempre Su tan apegado
BY: BYRON
sábado, 24 de enero de 2009
"Amada inmortal"
Incluso cuando estoy en cama mis pensamientos van a hacia ti, mi eternamente querida, ahora y entonces alegremente, después otra vez tristemente, esperando para saber si el Destino oirá nuestra plegaria, para hacer frente a vida que debo vivir en conjunto contigo o nunca verte. Sí, estoy resuelto a ser un extranjero vagabundo hasta que pueda volar a tus brazos y decir que he encontrado mi hogar verdadero con usted y envuelto en tus brazos puedo dejar que mi alma flote hasta el reino de almas bendecidos. Ay!, desafortunadamente debe ser así. Debes estar tranquila, tanto más pues sabes que te soy fiel; ninguna otra mujer podrá nunca poseer mi corazón, nunca, nunca. Oh Dios, por qué debe uno ser separado de aquella que le es tan querida. Para más, mi vida en Viena es actualmente desgraciada.Tu amor me ha hecho el más feliz y el más infeliz de los mortales. A mi edad necesito estabilidad y regularidad en mi vida, puede esto coexistir con nuestra relación? Ángel, acabo de oír que va el correo cada día, y por lo tanto debo cerrar esta, de modo que puedas recibirla la inmediatamente. Mantente tranquila; solamente al considerar tranquilamente nuestras vidas podremos alcanzar nuestro propósito de vivir juntos. Mantente tranquila, amame, hoy, ayer. Qué nostalgia llena de lágrimas por tí, por tí, por tí, mi vida, mi todo. Todos los buenos deseos a tí. Oh, continúa amándome, nunca juzgues mal el corazón fiel de tu amado.
Siempre tuyo.
Siempre mía.
Siempre de ambos.
By: Beethoven
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